5 cosas que hay que saber sobre el viñedo de Gaillac

…sino más bien desde la Antigüedad porque el viñedo de Gaillac fue explotado muy pronto. Sin embargo, no fue hasta la Edad Media cuando se desarrolló el cultivo de la vid, especialmente bajo el impulso de los monjes. Un resplandor rápidamente interrumpido por las guerras de religión y luego por la filoxera. Una vez más, los hombres de esta región han podido recuperarse. Hoy, jóvenes y ambiciosos viticultores enarbolan la bandera… y los aromas de este viñedo.

El viñedo de Gaillac es rico en colores y sabores. Desde las burbujas blancas o rosadas hasta los tintos de guarda, envejecidos durante decenas de meses en barricas para suavizarlos, pasando por los blancos minerales de la meseta de Cordais, ¡la riqueza y diversidad de la AOP Gaillac es suficiente para sorprender y desorientar! Una cosa es segura: la combinación de comida y vino no decepcionará a ningún epicúreo 😋. Y si aún tenéis dudas, los enólogos os recibirán con los brazos abiertos para pasar un buen rato en torno a una cata.

Hace más de 700 años nació la marca del gallo para distinguir los vinos de Gaillac, sin duda la marca de vino más antigua del mundo. Ahora es el turno del sello turístico Vignobles & Découvertes de revelar lo mejor de los viñedos franceses. En Gaillac, busque este logotipo verde y blanco entre viticultores, restauradores y proveedores de actividades: es la garantía de una acogida de calidad y de una experiencia enoturística exitosa.

Orgullosos de promover sus vinos y el arte de vivir asociado a ellos, los viticultores de Gaillac organizan regularmente conciertos de aperitivo. ¿El concepto? Combina el placer de una buena degustación, un momento agradable con los seres queridos y grandes encuentros. ¡Todo con música, por supuesto! Los viticultores os abren las puertas de su finca, los músicos gestionan la lista de reproducción y brindáis por esta velada que no olvidaréis pronto...